Todo sobre la nueva Sony A7 IV Review

 

La Sony A7 IV es la cuarta generación de cámaras sin espejo de Sony.
Es la más avanzada hasta el momento, ya que aporta muchas de las mejoras que Sony ha introducido en el enfoque automático y en el diseño de la interfaz desde el lanzamiento de la A7 III en febrero de 2018.
La A7 IV tiene prácticamente todas las especificaciones mejoradas con respecto a la A7 III, desde aspectos básicos como la resolución del sensor y la pantalla hasta opciones de captura de vídeo significativamente mayores.

 

Sensor BSI-CMOS de 33MP La A7 IV tiene un nuevo sensor BSI-CMOS de 33MP. Esto representa un alejamiento del chip de 24MP utilizado por la A7 III y sus competidores de Panasonic y Nikon.
Dado que los sensores BSI ya se utilizan en la actual generación de cámaras, no esperamos una gran evolución en la calidad de imagen. Tiene un ligero aumento del rendimiento lumínico.
A pesar de la mayor resolución, la A7 IV puede disparar a 10 fotogramas por segundo. Sin embargo, sólo puedes hacerlo en el formato comprimido con pérdidas si quieres disparar en Raw.
La A7 IV tiene una opción de compresión sin pérdidas, para cuando se necesita la máxima flexibilidad de procesamiento, pero la velocidad de disparo cae a unos 6 fps si se utiliza. Sony dice que la profundidad de la cámara permite más de 800 imágenes Raw+JPEG (o más de 1000 JPEG), pero esto es en el formato Raw sin comprimir, que de nuevo dispara a unos 6 fps

En cuanto al autoenfoque, las mejoras respecto a la A7 III deberían ser bastante significativas, no tanto por la promesa de enfocar en condiciones más oscuras, sino porque esa cámara fue una de las últimas Sonys que no integró el Eye AF en su sistema de AF principal, y se basó en un sistema de seguimiento de AF mucho más primitivo. 

La A7 III podía detectar los ojos humanos, pero sólo en un modo AF dedicado a los ojos. Si mirabas hacia otro lado, AF saltaba a otra cara en la escena, o cesaba si no había nadie.
La A7 IV sustituye el "Lock-on" por su más reciente "tracking" (en tiempo real), que utiliza la detección de patrones, colores, brillo, ojos y caras. Esto permite que la cámara cambie sin problemas entre los ojos, la cara, la cabeza y el cuerpo de la persona según sea necesario, para continuar el seguimiento incluso si mira o se aleja, en lugar de distraerse con otra cara. En la práctica, el sistema es muy fiable.
La A7 IV también tiene modos que pueden detectar y rastrear con mayor precisión a los animales, incluidos los pájaros, los perros y los gatos. Por primera vez, estas capacidades de detección de animales se extienden también al modo de vídeo de la cámara.

 

El modo de película tiene su propio interruptor. En el menú de ajustes te permite elegir qué ajustes se conservan y cuáles se mantienen por separado para las fotos y el vídeo. 

Después del autoenfoque, otra mejora es la capacidad de vídeo. La a7 III fue el primer modelo A7 en ofrecer captura 4K. Su implementación fue bastante buena para principios de 2018, con una captura sobre muestra a 24p desde todo el ancho de su sensor. 

La A7 IV añade la captura de 10 bits para aumentar la flexibilidad del procesamiento de imágenes Log y permitir la captura completa de Log Gamma Híbrido (HLG) para su reproducción en televisores HDR.
También tiene la capacidad de grabar a 4K/60p para la captura de acción o el trabajo a cámara lenta.

 

 

Una pantalla totalmente articulada puede ser útil para fotografiar a nivel de la cintura, hacer vlogging o selfies. También te permite supervisar la cámara si utilizas su modo de transmisión.

 

 

 La A7 IV se convierte en la cámara a7 más cara de la historia.

Con un precio similar al de la EOS R6 de y la Nikon Z6 II. La Lumix DC-S5 de Panasonic, ofrece una especificación de vídeo bastante similar, pero su autofoco no es tan eficaz. Al igual que la Nikon, sin embargo es menos costosa.
La A7 IV se impone a su predecesora, pero también está la a7C, más pequeña y menos cara, que comparte la mayoría de sus especificaciones con la A7 III.
La única diferencia importante es que la a7 C tiene una velocidad de sincronización del flash más lenta y un visor más pequeño pero de mayor resolución. La a7C tiene un sistema de AF más nuevo que el de la a7 III, por lo que su rendimiento será un poco más parecido al de la nueva cámara.

El cuerpo de la A7 IV es idéntico al de la A7S III, que ofrece una serie de refinamientos respecto al modelo A7 anterior. La empuñadura es ligeramente más profunda, el joystick de la parte trasera se ha mejorado y hay una toma HDMI Tipo A de tamaño completo en el lateral de la cámara. 

 

Estamos deseando ver por primera vez la A7 IV con sus menús mejorados y el uso ampliado de la pantalla táctil.
Los menús tienen las pestañas de las secciones en el lado izquierdo de la pantalla, lo que significa que estás a un clic de poder saltar entre pestañas. También son sensibles al tacto, por lo que no es necesario hacer clic o tocar nada.
Esta disposición hace que los menús sean mucho más rápidos de navegar, al igual que los títulos de las sub-secciones dentro de cada pestaña. La disposición difiere de la de las anteriores cámaras de Sony, pero las relaciones subyacentes entre los ajustes siguen siendo las mismas, por lo que no debería tardar en familiarizarse con el nuevo sistema si ya es usuario de Sony.

Sony ha ofrecido Bluetooth en sus cámaras durante muchos años, pero lo utiliza sólo para transferir datos de localización desde los smartphones. El A7 IV añade una opción de conexión constante como la que ofrecen la mayoría de sus rivales. Esto significa que sólo tienes que emparejar la cámara con tu smartphone una vez, ya que automáticamente se restablece la conexión Bluetooth de baja energía, lo que hace que sea mucho más rápido y sencillo transferir las imágenes a tu teléfono.

 

 

 La a7 IV utiliza la misma batería NP-FZ100 que la A7 III y otras cámaras más recientes de Sony. Es una unidad útil y robusta que permite a la A7 IV alcanzar un índice de duración de la batería CIPA de 580 disparos por carga utilizando la pantalla trasera y 520 disparos por carga utilizando el EVF.
Un índice de más de 500 disparos por carga significa que no hay que preocuparse por la duración de la batería si no se trata de las tomas deportivas o de bodas profesionales más intensas.
Como era de esperar en una cámara nueva, la A7 IV se puede cargar o alimentar a través de su toma USB-C.

Mucho ha cambiado en los ocho años transcurridos desde el lanzamiento del A7 original. 

La tecnología también ha evolucionado, y el autoenfoque, en particular, ha mejorado en términos de velocidad, sofisticación y simplicidad, hasta el punto de que ya nadie sugiere que las DSLR mantengan la ventaja.
El paso de Sony a baterías más grandes ha tenido un gran impacto en la usabilidad de sus cámaras. Las funciones de vídeo también se han ampliado considerablemente, y el cuarto modelo A7 vuelve a situar a la serie a la altura de sus competidores.